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Faruqi and Faruqi Defiente Exitosamente Cargos de Violación

June 7, 2015 Legal Team

Conocida como un bufete que toma demandas colectivas en contra de corporaciones importantes en todo el mundo, Faruqi and Faruqi defendió recientemente la acusación de violación de Alexandra Marchuck en contra de Juan Monteverde, uno de los socios más importantes del bufete. El jurado encontró que la acusación en contra de Monteverde fue fabricada. Marchuck reclamaba $20 millones como compensación por daños. El acusado tuvo que pagar $140,000 dólares a Marchuck bajo la ley de derechos humanos de la ciudad de Nueva York.

El blog popular legal, Above The Law, tuvo la oportunidad de entrevistar al jurado de este caso. El jurado, que estuvo compuesto por cinco hombres y tres mujeres, se inclinaba más por no responsabilidad. La mayoría no creyó el “100 por ciento de lo que ella dijo,” y pensaron que ella era “claramente víctima de algo.” El jurado tomó nueve horas para deliberar, y hubo hasta pláticas sobre no llegar a un veredicto.

Para que un caso de acoso sexual en el trabajo sea legítimo, debe de demostrarse que existieron avances y comentarios sexuales que crearon un ambiente hostil en el lugar de trabajo y que una persona, de manera razonable, se vea forzada a renunciar.

Todos en el jurado coincidieron en que Juan no era del todo una persona moral, y que presentaba el perfil de un hombre mujeriego que cuenta chistes inapropiados. Pero cuando se llegó a decidir si hubo avances sexuales no bienvenidos, el jurado acordó por unanimidad, que eso no sucedió.

El factor decisivo del caso fue durante una fiesta Navideña, después de la cual, Juan y Alexis tuvieron contacto sexual. Alexis básicamente mantuvo que ella estaba muy tomada para dar consentimiento. Pero fue claro que sí hubo consentimiento de su parte comprobado por correos electrónicos, testimonio de empleados, y un testimonio contradictorio de la misma Alexis. Se encontraron manchas de sangre en la alfombra, que fue de hecho, lo que absolvió a Juan. Alexis envió un correo electrónico a Juan el día siguiente, y le pidió que limpiara la mancha, y ella se disculpó por ello.